Ir al contenido principal

17. Tâter le terrain

 Bueno, en esta entrada vamos a hablar de lo que sería para nosotros el tutor ideal, por desgracia, debido a cierta operación que tuve que hacerme, no estuve en clase como para poder sacar las ideas comunes que se sacaron ese día, sin embargo, lo que voy a hacer es, primero, hablar de las cualidades que he ido encontrando en los blogs de los compañeros y, justo después, hablaré de cómo vería yo a mi tutor ideal.


Como he dicho antes, lo primero será ver qué rasgos deben definir a un tutor ideal según mis compañeros y lo que hemos dado en clase, para ello, voy a optar por coger lo expuesto en el blog de mi compañera Silvia Maroto:

- Alegre/entusiaste

- Creativo

- Resiliente

- Liderazgo

- Honestidad

- Empatía

- Asertivo

- Observador

- Respetuoso

- Con habilidades sociales


A continuación os mostraré lo que, para mí, veo más importante de un tutor, lo que yo querría ser o querría llegar a ser como tutor. Para empezar, igual que está citado anteriormente, me gustaría ser empático, y no solo empático al nivel de entender que un alumno puede tener una discapacidad o problemas cognitivos sino también comprender cuándo un alumno puede encontrarse en una mala situación y actuar bien respecto a esa situación (como una ruptura de pareja que suele ser incluso traumática en algunos adolescentes). También, por supuesto, debería ser asertivo con mis alumnos. Organizado, claramente, me he encontrado no solo con profesores sino también con tutores que son poco o nada organizados y eso, el alumnado, lo sufre mucho. Por supuesto también creativo, un tutor creativo y dinámico ayuda y mucho a sus alumnos y les motiva a estudiar y trabajar. Finalmente, me gustaría destacar el hecho de tener habilidades sociales desarrolladas pues hay profesores y tutores con los que me he encontrado que no han sabido desarrollar o utilizar las habilidades sociales y eso a mi me ha afectado personalmente. 




Para finalizar, decir que seguramente no cumplamos ni yo ni mis compañeros todos estos rasgos a la primera cuando seamos tutores, sin embargo, pienso que éstas habilidades o rasgos o características se van desarrollando con el tiempo y estoy seguro que todos, con un poco de trabajo y esfuerzo conseguiremos ser buenos tutores o al menos lo suficientemente buenos como para que nuestros alumnos no pasen por lo que pasamos nosotros (de los errores siempre se aprende, tarde o temprano). 


Nota a pie de blog: "Tâter le terrain" significa en español "Tantear el terreno" que creo que es lo que nuestro profesor Xoán ha querido hacer para ver cómo vemos a un buen tutor y profesor y poder, él mismo, desarrollar esas características para ser aun mejor profesor (que es lo que incluso nosotros buscaremos cuando empecemos a dar clases). 

Comentarios

Entradas populares de este blog

19. Casser les pieds à quelqu’un

 Bueno, en ésta penúltima entrada del blog os voy a hablar un poquito, solo un poquito del lenguaje inclusivo, va a ser, de hecho, muy breve pues, si encuentro la manera, os pondré aquí mi TFG que habla sobre éste tema y os servirá mucho más que lo que pueda decir por aquí.  Para empezar decir que el lenguaje inclusivo es aquel en el que no se utilizan géneros o se utiliza un género neutro que englobe a todos. Muchas veces tendemos a confundir el lenguaje inclusivo como aquel en el que se de visibilidad a las mujeres (cosa que, por supuesto, está genial) pero, el verdadero lenguaje inclusivo (y aquí creo que es donde empezaréis a descubrir cosas nuevas sobre el tema) va dirijido a mostrar, como ya he dicho, un género neutro, neutro porque existen, entre otros, las personas no-binarias, las cuales no determinan sus sexo ni en masculino ni en femenino completamente, es por ello que se busca entonces la utilización de un neutro.  Aquí es donde entra en escena el español como idioma, mucha

1. Tel père, tel fils...

 Si miramos en retrospectiva... Creo que todos odiamos a los franceses, y, sin embargo, aquí estoy, siendo graduado en Estudios Franceses. Aunque bueno, mejor comenzar por el principio... Me llamo Daniel Vázquez Gómez, Dani para los amigos, soy de Ceuta, si, esa ciudad a la que solo miramos cuando saltan la frontera... Y tengo 25 años, aunque me conserve como una rosa y aparente una juventud eterna (Just joking). La verdad, si miro a mi infancia me doy cuenta de cómo he cambiado de rumbo, de hecho, yo iba para Arquitectura (desde luego nada que ver con cómo he acabado), me encantaba la arquitectura, me encantaba eso de diseñar edificios, ese sueldazo (si, cuando era pequeño las crisis no habían acabado de mostrar sus efectos) pero fijaos, conocí esa preciosidad de asignatura llamada Física y Química y... bueno, digamos que aprobé casi por suerte. La verdad, no se qué me dio pero hice un giro de 180º y me metí en letras puras y, sorprendentemente, se me daban bien, así que seguí ese cam

5. Être comme les deux doigts de la main

 En este blog nos han pedido una pequeña reflexión personal en la que podemos hablar sobre profesores o Educadores que nos han marcado a lo largo de nuestro recorrido educativo. He de decir que, a pesar de mis 25 años, en los cuales he estado de aquí para allá en diversos centros educativos, he encontrado, podríamos decir, pocos profesores dignos de mención. Por supuesto, algunos hay que me han marcado, y los que lo han hecho, ha sido para bien y de una manera bastante profunda. Para comenzar podríamos hablar de mi primera profesora, la primera de todas, la de parbulitos, Maria Rosa era su nombre, por supuesto hacía honor a su nombre, dulce, dedicada, un amor de persona como ella misma. Esta profesora se notaba que era alguien DEDICADA a lo que hacía, era, como ya he dicho, alguien agradable, alguien con una bondad inmensa y alguien que, a día de hoy, después de tantos años que han pasado, aun me recuerda si me ve por la calle, cosa que muchos profesores no cumplen a día de hoy. Creo q